Inteligencia artificial y ciberseguridad. ¿Una relación próspera?
El vertiginoso avance de la tecnología transforma de manera constante la forma de hacer las actividades cotidianas, incluso cuando estos cambios pasan desapercibidos en nuestra rutina. Esto se refleja en la evolución de los canales y formas de comunicación, en cómo compramos y vendemos, cómo consultamos y consumimos información, e incluso en las estrategias para proteger nuestros datos personales.
En este contexto, la ciberseguridad se ha vuelto un
pilar central para garantizar la viabilidad de nuestras actividades
en el mundo digital, exigiendo una actualización constante de las
amenazas y soluciones emergentes.
La inteligencia artificial (IA) ha surgido como una
herramienta poderosa para enfrentar estos desafíos, y en Equifax
estamos convencidos de su potencial para mejorar tanto la seguridad
como la eficiencia en los negocios. Utilizamos IA para detectar
fraudes en tiempo real, identificar amenazas y optimizar la
experiencia del usuario, reduciendo fricciones y aumentando la
confianza en los procesos.
Nuestro enfoque en IA se basa en pilares sólidos:
aprendizaje automático, redes neuronales y asistentes virtuales,
herramientas que ya están en uso en soluciones como Kount, diseñada
para bloquear fraudes y mejorar las transacciones digitales.
En Equifax, hemos desarrollado un programa robusto de
gobernanza de IA, que se asegura de que nuestros sistemas operen de
forma transparente, justa, explicable y segura. Nuestros principios de
IA, agrupados bajo el acrónimo MAJESTIC (Monitoreado, Responsable,
Justo, Explicable, Seguro, Transparente, Inclusivo y Competente),
guían el desarrollo y la implementación de nuestras soluciones.
La seguridad de la información es clave para nosotros. Invertimos
continuamente en la mejora de nuestras capacidades y herramientas para
proteger los datos de nuestros clientes, manteniendo la confianza como
la base de cualquier negocio en la era digital.
En resumen, la IA no solo representa una oportunidad
para transformar la ciberseguridad, sino que, cuando se gestiona
adecuadamente, permite a las empresas mejorar la eficiencia, la
experiencia del cliente y, en última instancia, su competitividad en
el mercado.